No creo que haya habido obra de Hans Zimmer más esperada y que haya generado más expectación que la segunda entrega de su oscarizada Dune (21), de la que se ha lanzado un cebo con el adelanto de dos temas que inevitablemente son destacados hoy en MundoBSO del mismo modo que están siendo comentados por la afición a la música de cine. Zimmer es un fenómeno de masas, una rock star (para bien y para mal) que genera inamovibles debates entre sus muchos seguidores y sus muchos detractores. Yo no me posiciono ni en un bando ni en otro: hay obras suyas que me gustan y obras suyas que me disgustan, bandas sonoras que me parecen muy acertadas e interesantes y otras no tanto. En lo que sí me posiciono inamoviblemente es en defenderle como hombre de cine, como cineasta que ama y al que le importa el medio allá donde otros lo que aman y lo que les importa es mucho más lo que hacen que no para qué lo hacen. Recientemente Zimmer respondió en FB un comentario a la noticia de que Denis Villeneuve prometía una fecha concreta para el lanzamiento de la banda sonora del filme con un más o menos terminada y entonces, como es usual, una idea más... Es el tormento de cualquier creador que se implica no sin dudas en aquello para lo que crea: en el editorial de la semana pasada comenté algo similar con respecto a Williams y lo que para él suponía una dificultad, lo de analizar el funcionamiento de la cosa audiovisual.
Como digo, no creo que haya obra del compositor alemán que haya generado más expectación que la inminente Dune: Part Two, quizás alguna con Christopher Nolan, pero en cualquier caso juega ahora a su favor que lo que sea lo que sea lo que haya hecho proviene de algo ya conocido y obviamente no cerrado ni terminado. En la banda sonora del filme de 2021 abrió sendas que parece que se continuarán y desarrollarán, como por supuesto lo que ha de ser del tema de Atreides, apenas embrionario en la primera entrega. Pero a mí lo que más me apetece ver son los tonos y colores que tendrá su música, sus aspectos más relacionados con lo plástico, con la luz. Me encantó del primer Dune que arrancara en zona de sombras y oscuridades (los primeros minutos de la película eran de un fatalismo musical extraordinario) y llevara la música en busca de la luz, hacia la esperanza por la salvación, que es el punto en el que la dejó. ¿Qué pasará ahora?.
Hemos escuchado dos temas liberados, pero con ellos nada podemos avanzar: al Zimmer involucrado en el mundo de Frank Herbert hay que verlo en el mundo de Frank Herbert, no en nuestro mundo. En lo que a mí concierne sí es el Zimmer más esperado.