Fabula sobre los esfuerzos de un hombre por evitar el sufrimiento de su hijo mientras ambos son prisioneros en un campo de exterminio nazi. Para ello se inventa un concurso en el que el ganador de todas las pruebas se llevará un tanque.
A.- Estructura musical
La banda sonora de La vita è bella se estructura en base a la siguiente jerarquía temaria, en la que dos de sus temas están vinculados al personaje protagonista:
1. Tema Principal: Un tema alegre y bucólico, de cariz netamente italiano, que se ajusta, en su nivel dramático, al carácter alegre y desenfadado de Guido, el protagonista. Conoce distintas repeticiones y variaciones a lo largo de la primera parte del filme, en tanto que en la segunda aparece repercutido para en la tercera recuperar su significado original. En la primera parte es expansivo: contagia su vitalidad a todo su alrededor, allá por donde pasa el personaje. Como más adelante veremos, pierde su carácter expansivo en la segunda parte y sobrevive a su personaje.
2. Tema Central 1: Una bella melodía romántica, tema de amor que no comparten Guido y la mujer a la que ama, sino que expresa el sentimiento del hombre por su mujer, el cómo la mira y la siente. Ella, realmente, no tiene para sí esta música: es Guido quien la aporta, y se repite y varía a lo largo del metraje, pero nunca se repercute ni es expansiva, como el Tema Principal, ya que se limita a la relación de ambos personajes. También sobrevive al personaje.
3. Tema Central 2: Se trata de una pieza escrita por Jacques Offenbach para la Ópera Los cuentos de Hoffmann, escrita a finales del XIX y es, por tanto, un tema preexistente. Es aplicado de modo diegético: es la música con la que Guido y su mujer se conocen y con la que él comunica a su esposa que está vivo, cuando se encuentra internado en el campo de concentración. A diferencia del Tema Central 1, este tema sí vincula bilateralmente a ambos personajes, que lo comparten emocionalmente.
4. Tema Central 3 (Contratema): Música dramática y siniestra, que representa el concepto genérico del horror. Es presentada en forma de breves inserciones en la primera parte del filme, y se desarrolla en su plenitud en la segunda, donde llega a desbancar al Tema Principal, en una lucha por el poder en la que finalmente acaba siendo abatido, como desarrollaremos más abajo. Funciona como contratema precisamente por debilitar al Tema Principal y también al Tema Central 1, obligándoles a su repercusión.
5. Temas secundarios: En la película se emplean diversos temas secundarios, de aplicación diegética o en falsa diégesis, que son valses, foxes o bailes arábigos para escenas de fiesta.
B.- Estratos argumentales y desarrollo de los temas
La vita è bella se divide argumentalmente en tres distintos episodios: el primero transcurre en la calma y la felicidad de un pequeño pueblo; el segundo, en un campo de concentración nazi; el tercero es un epílogo. Cada uno de los episodios tiene un tratamiento musical diferenciado, pero evolutivo, en el que los temas musicales toman diferentes actitudes.
1. La vida es muy bella: Durante toda esta primera parte de la película tanto el Tema Principal como el Tema Central 1 (tema de amor) campan a sus anchas, repitiéndose o variándose sin que, por tanto, cambie su significado vitalista y optimista. No hay nada que dificulte u obstaculice la presencia de ambos temas, y se da lugar, incluso, a una bella elipsis en la que el compositor fusiona ambos temas concatenadamente para remarcar el paso del tiempo (Guido y su novia pasan a ser Guido, su esposa y su pequeño hijo). Sin embargo, en esta parte, se presenta de modo cauto el Tema Central 3 (contratema). No interfiere en el esplendor de los anteriores ni supone, en sí, una seria amenaza a la estabilidad de los mismos. Pero está presente, agazapado, expectante.
2. La vida ya no es bella: Desde la amenaza real de los nazis hasta cuando la familia de Guido es recluida en un campo de concentración, y a partir de ese momento, el Tema Central 3 (contratema) se impone con enorme poder frente al Tema Principal y el Tema Central 1 (tema de amor), que quedan muy debilitados. El contratema, que en la anterior parte se había limitado a advertir de su presencia, aquí ocupa el dominio absoluto del espacio físico y dramático del filme, lo que provoca, entre otras cosas, la automática repercusión del Tema Principal, que ya no puede significar lo mismo ni se puede expander como antes. Ahora, por el contrario, esta música se aplica más desesperada, dolida, en una suerte de clamor en el que el tema viene a decir hay que sobrevivir a esto. Naturalmente, no goza de la vitalidad con la que se caracterizó en la primera parte de la película. Algo muy parecido sucede con el Tema Central 1 (tema de amor), que apenas es empleado porque, entre otras cosas, Guido no puede ver a su mujer. En su sustitución, sin embargo, entra en juego el Tema Central 2, que Guido pone en un tocadiscos para comunicarse con su esposa. Cuando, desesperado, la busca entre los camiones de evacuados, sí suena como referencia, pero también lo hace el Tema Principal, que se inserta como subtema del contratema, evidenciando aún más el poder devastador de este último.
3. Epílogo: un nuevo comienzo: Guido es asesinado por los nazis, pero su hijo logra sobrevivir, cumpliéndose así el gran anhelo del protagonista. Con la música sucede algo muy singular: el personaje muere, pero su música le sobrevive y el Tema Principal reaparece en todo su esplendor cuando el pequeño se encuentra con el enorme tanque que cree que es el premio del juego de su padre. Lo mismo sucede con el Tema Central 1 (tema de amor), que resucita en cuanto el pequeño Giosue se reencuentra con su madre. El ambos casos, el padre sigue vivo, a través de la música. Naturalmente, el contratema ha desaparecido en cuanto el campo de concentración queda liberado.
Hay una enorme carga poética y simbólica en el hecho de que la música sobreviva a su personaje. Un ser que ha sido abatido, pero cuya música sí ha acabado venciendo. En otras palabras: el protagonista sucumbe ante los nazis, que le matan, pero su música -y lo que representa- no: el Tema Principal y el Tema Central 1 (tema de amor) reviven con todo su esplendor. Una hermosa concesión poética, simbólica y metafórica del director y del compositor.
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