Reseña de Gabriel Yong:

En este título, uno de los más importantes de la Historia de los videojuegos, se consagra en todos sus apartados la filosofía del director Fumito Ueda acerca del diseño por sustracción, donde lo único central es enfocarse en lo narrado no existiendo la posibilidad de que existan elementos que distraigan al jugador como misiones secundarias o personajes ajenos a la historia principal. Esto se practicó por primera vez en ICO (01), donde la música de Oshima ayudaba a crear esa sensación de soledad en el castillo donde estaban los protagonistas, pero ahora llevado a un nivel superior.

Shadow of the Colossus es un juego muy complejo en su planteamiento, ambigua en muchas partes, donde lo épico se vuelve trágico, lo bello está fuera del alcance de los hombres y al final el amor de Wander o quizá su egoísmo por no respetar las leyes naturales le traerá su propia destrucción: es aquí donde la música es capital para entender toda la dimensión de este juego: Otani plantea su música y sus efectos sonoros en siete secciones bien definidas: el prólogo, la exploración, la llegada, el combate, el fin del combate, las cinemáticas y el epílogo.

• EL PRÓLOGO: en esta historia ancestral ubicada en tierras inhóspitas se presenta a Wander rumbo a un lugar en concreto y en su travesía también va la música con una serie de temas y motivos.

1. Tema principal: presentado en toda su magnitud en la cinemática inicial, es un tema místico, precioso con tintes de majestuosidad. Es un tema que también es ambiguo ya que en primera instancia tiene la idea de representar la lucha de Wander por conseguir lo que tanto anhela y así lograr su final feliz recorriendo desiertos, acantilados, hasta llegar a la tierra prohibida, pero representará otras cuestiones.
2. Tema del templo de adoración: destila cierto misticismo por el lugar donde Wander ha llegado, solo sale al inicio del juego ya que busca generar asombro.
3. Tema del ritual: tiene tres apariciones en el juego, la primera en el prólogo donde se revela que lo que Wander llevaba consigo era el cuerpo de Mono y sigue sonando mientras lo coloca en el altar ceremonial.
4. Tema de Lord Emon: para el anciano chaman jefe del pueblo donde viven Wander y Mono, se le aplica un tema con tintes folclóricos, donde sobresalen los instrumentos de viento. En su primera aparición sirve para narrar el contexto de la historia y el motivo de que ese lugar esté prohibido, y la narración que él realiza es crucial para entender el mundo donde está situado el juego.
5. Motivo de las sombras oscuras: representa a los seres extraños que aparecen algunas veces en el juego, solo tiene dos apariciones categóricas, una en el prólogo y otra en el epílogo.
6. Tema de Dormin: a esta deidad incorpórea se le aplica un tema con coros poderosos a la vez que algo siniestros, que realzan su poder y llega a su culmen en esta parte del juego cuando Wander acepta el trato de destruir los colosos para que esta deidad le devuelva el alma a Mono.
7. Tema de muerte: este es un tema muy interesante pues es de carácter transversal y se aplica a una serie de personajes a lo largo del juego, en primera instancia a Mono, luego cuando Dormin menciona que los colosos deben ser asesinados y posteriormente tiene otras apariciones.

• LA EXPLORACIÓN: este es quizás uno de los mayores logros en la Historia de los videojuegos, contradiciendo la tradición de muchas sagas donde los mundos se sentían vivos no solo por la variedad de cosas a hacer sino también por su música, grandes temas locativos que acompañaban el viaje de los personajes en sus heroicas travesías. Aquí la música está ausente en este amplio mundo abierto y son los efectos sonoros los que magnifican la experiencia, sonidos de entornos naturales como cuevas, cataratas o selvas hasta el galope sin cesar con la yegua Agro. Todo se une para crear un entorno perfecto de soledad en estas tierras prohibidas que contienen rezagos de una civilización que hace mucho tiempo habitaba el lugar.
• LA LLEGADA: tras la llegada a la zona indicada, donde reside el coloso, Otani los presenta no de manera violenta sino pacífica, puesto que solo deambulan en la zona donde están atrapados. Se trata de unas músicas que guardan una gran carga lírica y de belleza que se verá alterada.
• EL COMBATE: es una de las partes fundamentales del juego. La música ayuda a crear ese sentimiento de lucha contra algo que sobrepasa en todas las dimensiones, una música sinfónica de gran poder en quince de los dieciséis colosos, pues para el último el compositor reserva una sorpresa.
• EL FIN DEL COMBATE: posterior a la adrenalina que brinda el combate se esperaría una música triunfal de la misma envergadura, pero Otani y Ueda dan otra lección magistral al hacer que lo que se escucha sea una música muy parecida a un réquiem, casi lamentando la muerte del coloso, un tema que se mantiene a lo largo del juego y que incluso sirve de brújula moral al jugador, debido a que lo que se está haciendo es algo que no es correcto, pero el deseo de salvar a Mono impulsa a seguir y eso será lo que selle el destino de Wander.
• LAS CINEMÁTICAS: tras cada combate hay teletransportación al templo de adoración y en aquel vórtice se incluye un efecto sonoro que irá creciendo mientras se avanza en el juego, siendo la voz de Mono la que intenta persuadir para detener esta locura. Tras vencer al primer coloso el protagonista se acerca a ver a Mono y aparece el tema de muerte en todo su esplendor, una señal que es algo irreversible. Wander sufre al ver a su amada en ese estado. Luego se introduce un motivo musical que indica la destrucción de cada coloso, del primero al quinceavo coloso.

Tras la batalla contra el cuarto coloso vuelve el tema de muerte indicando el estado inmóvil de la muchacha. Tras vencer al octavo coloso se plantean dos cuestiones musicales: en primer lugar una ensoñación de Wander, que ve a Mono levantarse del altar con el tema principal, pero en la forma de ejecución del tema representa más una ilusión que algo que en verdad vaya a materializarse; en segundo lugar, cuando despierta el muchacho se plantea un tema que nunca despegará y es el de amor, un tema sencillo escrito para piano que acompaña el gesto de Wander al tocar la mejilla de su amada. Tras vencer al doceavo coloso cambian las cinemáticas y es ahora un grupo de jinetes encabezados por Lord Emon quienes se dirigen al templo con su tema musical a toda velocidad, denotando la impetuosidad por llegar a aquel lugar y parar el ritual, pero después aguarda el gran final.

• EL EPÍLOGO: antes de llegar al lugar de residencia del último coloso se produce la pérdida de la yegua, que cae por un barranco. El tema de muerte vuelve indicando su supuesta muerte en primera instancia y en segunda como señal que no se debe seguir, pero al seguir adelante la música destinada a un combate final épico cambia a una de estilo más triste, sombría y con gran presencia de coros, que acompaña en la escalada final, un tema al que es el del destino de Wander.

Tras vencer al último coloso llega la cinemática final, donde se resolverán todos los temas musicales planteados a lo largo del juego. En primera instancia llega Emon al templo, donde se derrumba la última estatua y el motivo de la destrucción de los colosos vuelve con fuerza descomunal, esta vez interpretado en un órgano, y se intensifica cuando el chaman ve el cuerpo de Mono sobre el altar. Tras la teletransportación de Wander y tras haber completado el ritual este se ve transformado en una horrible figura donde de su cabeza salen dos cuernos y su piel se ha empalidecido, a lo que se agrega que cuando se le presenta vuelve el tema de Dormin ya que al final de todo el objetivo de esta deidad era usar al joven como recipiente para así poder resurgir.

Emon lo encara a Wander y piensa matarlo por ese acto tan peligroso. Vuelve el tema de muerte con él y se intensifica cuando le disparan una flecha. Luego otro de los guardias lo acuchilla y del pobre muchacho sale un líquido negro (como le salían a los colosos al morir) y tras ello vuelve el motivo de las sombras oscuras cuando se transforma en una de ellas y también vuelve el tema del ritual, pero de una forma triste ya que Mono sigue sin despertar y el muchacho cree que no ha funcionado todo lo que hizo. Esto marca última vez que ve a su amada, tras lo que se da el despertar de Dormin cuando recobra su forma original: podría esperarse que su tema se alzaría victorioso, pero Otani decide algo más ingenioso ya que el tema que vuelve es el del destino de Wander cuando se recobra el control y en esta nueva forma se intenta aplastar a Emon pero sin lograr nada, indicando que su viaje ha llevado a esta tragedia, a este camino sin retorno mientras el chaman escapa, llega a la parte más alta del templo y arroja la espada con el tema del ritual esta vez es para sellar a Dormin para siempre y cuando funciona su sombra es arrastrada se da por última vez el control del juego para controlar al espectro de Wander que intenta desesperadamente llegar al altar. Pero es imposible y acompañado del réquiem de la muerte de los colosos también marcará su final definitivo en esta trágica historia, ya que el que hizo daño a tan magnificas criaturas merece el mismo fin.

Pero este no es el final de la historia, ya que Dormin cumple su palabra y Mono despierta sorprendida y con ella se encuentra la yegua, que sobrevivió a la caída al río. Se presenta a Emon volviendo a su pueblo y destruyendo con él el acceso a ese lugar mientras aparece el tema principal que aquí podría representar ese objetivo cumplido de que la chica esté con vida y la destrucción y daños colaterales causados al acompañar también a las imágenes de los colosos muertos, con sus cuerpos siendo reclamados por la vegetación. En los momentos finales Emon vuelve la mirada atrás con su tema y pronuncia esta frase:

Pobre alma impía... Ahora, ningún hombre volverá a invadir este lugar. Si estuvieras vivo... Si es posible que continúes existiendo en estas tierras selladas... algún día, tal vez harás expiación por lo que has hecho

Con la frase llega la última declaración del tema principal casi como diluyéndose por completo. En los últimos compases del juego Mono encuentra en el mismo lugar donde murió Wander un bebé con cuernos al que adopta y que cuidará al igual que la yegua en la parte superior del castillo, donde encontró un lugar lleno de vida y con ella también surge otro tema de la esperanza, que después de todo lo acontecido en el videojuego es una justa recompensa tras ser testigos de semejante tragedia causada por el amor.