Planteada más como un divertimento (violento, extremo y gore) que como un filme en la tradición del legendario ex-combatiente esta es una banda sonora cuyo su mayor interés radica en lo que se recupera del pasado: el tema central que compuso Tyler para John Rambo (08) y muy especialmente el inmortal tema principal de Jerry Goldsmith. Ambos temas se conjugan armoniosamente: el de Tyler para enfatizar lo humano, el sufrimiento, en tanto el de Goldsmith para remarcar la fortaleza y determinación. Y en ambos casos, las apariciones aportan un aire espectral, casi fantasmagórico, que expone por el contraste la lamentable situación en el presente del personaje. Por supuesto, cuando suena Goldsmith nada hay que resulte tan emocionante, pero no es menos cierto que el tema central de Tyler cumple con creces su cometido. En todo lo demás, temas para las acciones y músicas sentimentales varias, no hay otro interés que el de cumplir correctamente sus cometidos.