El compositor aplica una apacible y tranquila creación en la que va calando, poco a poco, un emotivo sentido de la nostalgia y la aflicción, de modo pautado y cauto. Se trata de una música de contenida intensidad con momentos delicadamente perturbadores, y que ubica en la psicología de los personajes fusionándolo con la de los entornos donde estos se mueven. Aporta un color mágico, con coros, que pincela una sensación de cierta irrealidad, fantasiosa, y en la combinación entre belleza y tristeza obtiene sus mejores logros.