Una periodista es enviada a Islandia para investigar la desaparición de un cámara de su empresa, pero cuando llega lo que encuentra es un monstruo depresivo y alcohólico que no desea más que morir.
Banda sonora de aires minmalistas, para recrear un entorno y ambiente de aparente magia y ficción, pero que acaba por ser estático y monótono, desangelado.