Reseña de Gabriel Yong:

En esta primera incursión del caballero ladrón Lupin III en el 3D, Yuji Ono trae también para esta aventura todo su arsenal de temas que compuso hace ya casi cincuenta años. El compositor los conoce a la perfección, sabe dónde colocar cada uno para darles perspectiva dramática, remarcando la astucia y sagacidad en Lupin, la sensualidad en Fujiko, la tenacidad en Zenigata, etc. Pero a lo que podríamos considerar ya visto a lo largo de las diferentes entregas de la saga en esta ocasión le agrega un tema más, uno que categóricamente se convertirá en el tema principal de la película y será cabecera del arco transformativo de su protagonista, la joven Laetitia.

Ella es huérfana desde bebé debido a que los nazis atentaron contra su familia cuando buscaban el Diario Bresson, siendo recogida por el profesor Lambert, uno de los que ejecutó el atentado. Él en el presente manipula a la muchacha con promesas vacías de un futuro mejor si es que roba el diario. Ella al estar dominada por la voluntad de otro no presenta música, está expuesta a la merced de aquel cruel hombre y la ausencia de música lo sugiere. Pero tras sorprender a Lupin en su apartamento mientras el ladrón buscaba el diario, la muchacha decide ayudarlo a recuperar este, que estaba en las manos de los nazis y cuando narra aspectos de dicho objeto surge la música, expresando los deseos de la muchacha de explorar el mundo, de cumplir su sueño de estudiar arqueología, de un futuro mejor, pero dicha música guarda un secreto más.

El tema vuelve a aparecer en otro momento clave de la película: Lupin, tras sacar deducciones sobre esta muchacha, le menciona aspectos de su pasado y le revela su verdadero origen, que esta muchacha supuestamente solitaria en este mundo, tiene un nombre, tiene un pasado. Ella es la nieta de Bresson y dueña legitima de dicho diario, la música crece, se va expandiendo mientras ella escucha la verdad, teniendo ella su anagnórisis musical. Pasado el clímax de la película y muerto Lambert, ella es libre ya de cualquier atadura, pero mientras los demás temas seguirán inmutables al tiempo en busca de nuevas aventuras, es el de ella el que se expandirá en los créditos finales en forma de canción, señalando que esta chica a pesar de todo lo que vivió tiene un futuro prometedor por delante y que llevara con orgullo aquel apellido por el resto de sus días.