Secuela de Free Willy! (93) , en la que el joven protagonista vuelve a encontrarse con la orca, que corre de nuevo peligro por culpa de una petrolera.
El compositor sigue en la misma línea musical que la aplicada en la primera entrega, con el empleo de su bello tema principal y una sucesión de temas de acción más o menos convencionales. Más de lo mismo, aunque decentemente hecho.