Un vampiro irlandés viaja a Los Ángeles para secuestrar un poeta y esperar, en su castillo, la llegada de su bella hermana.
El compositor evita la música del género de terror y edifica una bella y evocadora creación puramente irlandesa, donde se destaca el uso instrumental y la voz de la Mezzo Soprano Mashal Arman, fusionando instrumentos reales y sampleados. Con todo ello no hace, claro, una partitura folklórica, sino que a partir de ello construye música tensa y dramática.