Tras pasar una temporada en una clínica mental, un joven príncipe ruso vuelve a casa. Su bondad y su falta de ambición chocan frontalmente contra un mundo cruel e implacable. Al tiempo que se compromete con una joven inocente, intenta salvar a otra mujer menos inocente, pero los celos y su ingenuidad darán lugar a una tragedia.
Banda sonora dramática de gran intensidad, con música sinfónica y coros. Se incluye en Les meilleures musiques des films de Gérard Philipe (22)