Adaptación de la tragedia de Shakespeare sobre el príncipe de Dinamarca dispuesto a vengar la muerte de su padre.
El insigne compositor ruso aplica en forma de música el sentido real del relato shakesperiano, con una partitura que desvela los conflictos internos, el amor del hijo por su padre y el imprevisible carácter del protagonista, subrayando las imágenes con intensas melodías.