Cuatro jóvenes irlandeses acusados injustamente de perpetrar un atentado de la banda terrorista del IRA, son sometidos a torturas y a un burdo proceso judicial que les lleva a la cárcel durante años.
Banda sonora en la que abundan canciones, temas heavy y rock, tanto para una ambientación urbana como para dotar al filme de un cariz violento y agresivo.