Adaptación del clásico del cine fantástico alemán Münchhausen (64), sobre las aventuras del extravagante Barón Munchausen a través de distintos mundos.
Espectacular y pletórica partitura, en la que el compositor lució sus mejores recursos tanto para la recreación melódica de los imaginativos entornos en que se desarrolla la acción como para dotar al conjunto del adecuado aire extravagante y fantasioso.
Como en la propia película, la música está estructurada en distintos bloques, cambiantes en cuanto a estilo: ya sea en el sultanato, el infierno o la luna, la partitura acompasa impecablemente la odisea del protagonista y ofrece desde momentos de claro sentido de humor a otros de radiante belleza (como es el caso de un hermoso vals).