Un asesino a sueldo viaja al sur de España para su nueva misión. Allí conoce a una viuda con la que inicia una relación, que peligra cuando es reclamado para otro encargo.
Bella creación, una de las menos conocidas de su compositor, que desarrolla una partitura de género pero aportando su propia personalidad musical. Así, el jazz dominante es apacible y cálido, pero también nervioso y agitado, lo que genera la adecuada tensión. La parte dramática y romántica está teñida de un tono moderadamente afligido, pesimista. Con ello, la música aporta fragilidad e inseguridad a los personajes, con delicadeza y hermosura. Una obra sencilla y elegante.