Drama situado en Indonesia, en el que una funcionaria norteamericana es requerida por un periodista y un fotógrafo para adentrarse en la locura de la guerra.
El compositor elaboró una partitura en la que predominaron sonoridades etéreas y el empleo del sintetizador para la recreación de un ambiente de confusa irrealidad, en el que la aparente calma se trastocaba con giros bruscos y violentos.