Filme futurista, ambientado en un Nueva York controlado por los criminales, que han secuestrado al presidente de Estados Unidos. Un delincuente acepta intentar rescatarle a cambio de ver su condena perdonada.
Partitura que da al filme el adecuado cariz apocalíptico y violento. Se aplica música electrónica, minimalista, sin formar melodías (salvo las preexistentes) y que da al conjunto un ambiente frío, implacable.