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LOS OSCAR 2018

22/01/2019 | Por: Conrado Xalabarder | 1 comentario
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Por Juan Carlos Jiménez

Acabamos de conocer las nominaciones a los Premios Oscar y como suele ser habitual la categoría de mejor banda sonora no deja indiferente. Pero antes de analizar las candidatas hay que aclarar que quienes votan en esta categoría (y a la de mejor canción original) no son sino los propios compositores y letristas que forman parte de la Academia. Por lo tanto, los títulos son elegidos por sus compañeros de profesión y, por ello, la elección de los nominados merece consideración y respeto. Distinto es a la hora de elegir la ganadora ya que todos los miembros votan y el resultado final puede ser polémico.

Para las nominaciones de este año se ha recuperado una antigua norma que ha afectado a las partituras en consideración. En lugar de considerar todas las bandas sonoras originales de películas estrenadas en 2018, se hizo una criba para seleccionar tan solo quince que podían entrar en competición. Esta regla se hizo popular en los años 50, 60 y 70 y permitía dar a conocer partituras de calidad en películas menos exitosas (lo que ayudó a que un compositor tan importante como Alex North consiguiese nominaciones por títulos menores como Shanks, en 1974) De esta forma, el pasado mes de diciembre la Music Branch de la Academia anunció las quince partituras que podían llegar a ser nominadas y en un año sin trabajos de Thomas Newman o John Williams, la selección se hacía cuanto menos interesante. En la lista pudimos encontrar partituras ambientales capaces de jugar con el espectador (Annihilation, A Quiet Place), trabajos de autores veteranos para secuelas de éxito (Avengers: Infinity War, Fantastic Beasts: The Crimes of Grindelwald) e incluso partituras que habían pasado desapercibidas (Crazy Rich Asians y esa maravilla que es The Death of Stalin) Por último, la curiosa colaboración de Silvestri y Spielberg (Ready Player One) la partitura más extensa de Carter Burwell para el universo Coen (The Ballad of Buster Scruggs) la fabulosa obra de Nicholas Britell para Vice’y la ganadora del Globo de Oro First Man de Justin Hurwitz.

Las nominadas al Oscar han sido finalmente:

  1. Black Panther, de Ludwig Göransson
  2. BlacKkKlansman, de Terence Blanchard
  3. If Beale Street Could Talk, de Nicholas Britell
  4. Isle of Dogs, de Alexandre Desplat
  5. The Return of Mary Poppins, de Marc Shaiman

Lo de Black Panther es todo un hito ya que se trata de la segunda banda sonora de una película de superhéroes nominada al Oscar (tras la apabullante Superman de John Williams) Para componer la música, Göransson viajó a Senegal para conocer las diferentes texturas ambientales que iban a  definir su esquema musical. Emplea además voces africanas y una enorme cantidad de instrumentos autóctonos que le iban a permitir trabajar en la banda sonora una vez de vuelta a Los Ángeles. Un trabajo muy rico lleno de texturas tribales.

Parece increíble que BlacKkKlansman sea la primera nominación de un compositor tan veterano como Terence Blanchard. El trompetista de jazz ha sido un colaborador fundamental en la filmografía de Spike Lee. Para esta película Blanchard realiza una estupenda banda sonora que oscila entre lo orquestal con motivos militares y el funk para subrayar a los diferentes protagonistas del film. Personalmente, me gusta más lo que Nicholas Britell ha hecho con Vice pero junto a If Beale Street Could Talk le confirma como un compositor a seguir. Con esta última película ha conseguido su segunda nominación al Oscar en tan solo tres años. Su partitura es excesivamente romántica, distante pero cercana al mismo tiempo. Evoca una belleza y sensibilidad pocas veces disfrutables en el cine de hoy día. La instrumentación con solos de piano y de saxofón puede recordar vagamente a ciertos pasajes del Taxi Driver de Bernard Herrmann, pues acaba generando esa misma sensación de soledad. Una banda sonora poderosa en su aparente sencillez.

Isle of Dogs ha hecho a Alexandre Desplat merecedor de su décima nominación en un tiempo récord (doce años) Ecléctica nueva colaboración junto a Wes Anderson, quien cada vez prescinde más de músicas ajenas y decide confiar en el entramado musical de su compositor. Una fabulosa partitura con una instrumentación muy exótica (percusión japonesa, saxofón en registros muy bajos como golpes de efecto) para musicalizar un nuevo pasaje del universo de este director versátil. Sé que muchos aficionados están cansados de tener a Desplat siempre en consideración pero este es un trabajo notable, muy distinto a todo lo que ha hecho hasta ahora y que demuestra que Desplat es un auténtico camaleón capaz de adaptarse a todo tipo de cine.

Marc Shaiman consigue volver al ruedo tras lograr tres nominaciones a mejor banda sonora en los años noventa (cuando la categoría estaba dividida en comedia/musical y drama) Su obra para el universo Mary Poppins tenía la difícil tarea de ser equiparada con la legendaria creación de los hermanos Sherman para la original pero Shaiman lo ha conseguido con éxito. Brillante partitura llena de temas nuevos y alguna que otra alusión a las melodías míticas. Además, se integra a la perfección con las nuevas canciones también creadas por el compositor. Es extraño que la Academia nomine una banda sonora musical a mejor banda sonora original pero recordemos que La La Land se hizo con la estatuilla.

Por último, también me gustaría destacar las nominaciones a mejor canción original: All the Stars, de Black Panther, The Place where Lost Things Go, de Mary Poppins Returns (otra nominación para Marc Shaiman) Shallow, de A Star is Born  (que será la ganadora para premiar a Lady Gaga) I’ll Fight, del documental RGB (escrita por Diane Warren, quien consigue su décima candidatura aún sin ganar) y When a Cowboy trades his Spur for Wings, de  The Ballad of Buster Scruggs, que me parece una fabulosa canción y que de ser votante de la Academia, tendría mi voto.

Como anécdota, decir que si Marc Shaiman gana el premio en cualquiera de las dos categorías, se uniría al selecto club del EGOT al que pertenecen aquellos que han ganado los cuatro premios del entretenimiento americano (el Emmy, el Grammy, el Oscar y el Tony), todo un hito ya conseguido por los compositores Richard Rodgers, Marvin Hamlisch, Alan Menken y Quincy Jones. ¿Quiénes ganarán? ¿Quién te gustaría que ganase? Con el ganador del premio de la Crítica y el Globo de Oro Justin Hurwitz fuera de combate, parece que no está nada claro. Como afirmó William Goldman, Nadie sabe nada.

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Usuario: Javier González Moreno
Fecha de publicación: 23.01.2019
Creo que ganará Mary Poppins, aunque yo votaría la maravillosa Isla de perros. Vale que no ha sido un gran año de música de cine y eso lo podría aprovechar Black Panther gracias a su impacto social y ganar con una música simplemente correcta. Creo que es claramente la peor de las cinco finalistas. Si gana sería una desfachatez histórica, que por otra parte no sería la primera.
Lady Gaga ganará la canción, de eso no hay duda, aunque sería guapísimo que se lo llevara Carter Burwell.
Buen análisis, Juan Carlos, deseando volverte a leer por aquí.
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