En el Facebook de MundoBSO, Eduardo Manero plantea la siguiente cuestión:
Esta tarde revisitaba Forrest Gump y pensando en la banda sonora tiene momentos sublimes, originales, pero mayormente está compuesta por grandes hits de las épocas que revisita. ¿Cómo se valora una banda sonora en estos casos en que se mezclan músicas originales y canciones no originales? Otro caso que me viene a la mente es el del famoso plano secuencia de Goodfellas. Esa película no sería lo mismo sin "Then I kissed Him".
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Muchas gracias Eduardo pero deberíamos comenzar diciendo que Goodfellas y Forrest Gump no son equiparables, porque la primera solo hace uso de temas preexistentes y la segunda juega con la dualidad que comentas, como sucede con tantas y tantas otras películas.
Generalmente (no lo tomes como una respuesta absoluta, porque encontraremos de todo dependiendo de la película) las canciones contemporáneas a la época en que transcurre la acción tienden a ambientar mejor ese período, a darle el color adecuado, pero lo que es más importante: ayudan a meter al espectador en esa época, a hacerlo sentir como si estuviera físicamente en los años cuarenta, cincuenta, sesenta...
Es un efecto que, si está bien hecho, es de resultados maravillosos, porque opera esa magia de centrifugar al espectador hacia el escenario: algo que no necesariamente sucedería si dependiéramos de la escenografía, el vestuario o la fotografía, pues el espectador podría mantener distancias.
Siendo así, no importa qué canciones pongan mientras las que pongan sean de la época y ayuden a meter al espectador en contexto. Otra cosa bien diferente es cuando un personaje escucha esa música, porque es entonces un acto de elección y se aplica aquello de dime qué música escuchas y te diré cómo eres. De esto hablaré en otra ocasión, porque es un modo muy inmediato para definir a un personaje sin necesidad siquiera de que hable.
Una tercera vía sería mixta con respecto a las anteriores: el personaje no escucha una música, pero la música pre-existente que se aplica se le atribuye exclusivamente a él, y no al ambiente o al resto de personajes. Suele verse habitualmente en secuencias donde un personaje está en su soledad y suena una canción: el espectador vincula personaje y canción de modo automático y complementario.
No recuerdo bien cuál de los tres (o si los tres) supuestos suceden en Forrest Gump, pero da igual porque el efecto sería el que te he descrito. Y es un recurso narrativo (desde luego no solo estético o ambiental) fabuloso... pero que en realidad puedes explicarle a alguien en un par de líneas o de minutos.
La música original (cuando es incidental) opera en territorios diferentes que no tienen por qué colisionar con las canciones pre-existentes, pues al espectador le llega por otros canales. Si la música pre-existente ayuda como he dicho a meter al espectador en la época, la original (es así en el caso de Forrest Gump) explica al espectador a los personajes, lo que pasa piel adentro, y si con las canciones puede no llegar a importar cuáles pongas, sí es fundamental tener claro la música que vas a emplear... porque de lo contrario podría confundir mucho al espectador. Por ese motivo, en Forrest Gump cada tema musical cumple su cometido narrativo y no otro.
La diferencia entre emplear una canción con un personaje y hacerlo con un tema musical es que poco se va a poder hacer con una canción más que repetirla o a lo más variarla. Con un tema musical, puedes hacer transformaciones radicales, que lleven la música, siendo el mismo tema, de la alegría a la desesperación, en este caso del personaje. Algunos de los temas musicales de Forrest Gump hacen exactamente eso: navegar por diferentes estados de ánimo y emocionales y con ello se explica al espectador lo que le sucede al personaje.
Ahora sería excesivamente largo de explicar, pero resumiéndolo mucho: frente a las canciones el espectador tiene siempre una actitud activa, porque las tiene en primer plano de consciencia y las controla, para participar (o no) en ellas. Dicho de otra manera: el espectador las escucha y las ve. Con la música original PUEDE pasar lo contrario: que la actitud sea pasiva cuando no es consciente de su presencia y por tanto no solo no la controla sino que es justamente lo contrario, que la música es la que controla al espectador. Eso ayuda, volviendo a nuestro filme, a aportar matices importantes en la explicación del personaje, que queda más claro al espectador desde el guion musical que desde el literario... sin que lo parezca.
Repito que ambas no tienen por qué interferirse, aunque no pocas veces sucede y suele ser por falta de criterio. En el recuerdo que tengo de Forrest Gump es que ambos tipos de música cumplen estupendamente bien sus cometidos, sin molestarse. Eso sí, unas las puedes explicar en un par de líneas o minutos... pero te aseguro que la música incidental genera muchísima más literatura y discurso. En Forrest Gump, desde luego. Creo que será bueno revisarla para algún capítulo de "Lecciones de Música de Cine".